El hundimiento del Wilhelm Güstloff

 En apenas mes y medio se produce el centenario de una de las catástrofes más conocidas del mundo del transporte marítimo, el hundimiento del RMS Titanic, tal y como comentábamos recientemente en una clase de Historia de 4º ESO. Este accidente se llevó la vida de 1.517 personas en la noche del 14 al 15 de abril de 1912 tras chocar con un iceberg en una cadena fatídica de errores y distracciones de esas en las que el ser humano sólo repara cuando no hay marcha atrás y ha ocurrido alguna desgracia.

Sin embargo, hubo una catástrofe, en este caso provocada, en los estertores de la Segunda Guerra Mundial, que acabó con muchas más vidas, para ser exactos 9.343, en su mayoría mujeres y niños. Si queréis saber más sobre este sobrecogedor acontecimiento, podéis escuchar el podcast de mi admirada Nieves Concostrina sobre el suceso, que se produjo el 30 de Enero de 1945.

El teléfono: Meucci vs Bell

Estar abiertos a aprender es una actitud ante la vida. Hoy en clase me han sacado de un error, y no será que no se sabía,… simplemente a veces no estamos atentos a la realidad y nos perdemos detalles. ¡Muchas gracias Elena!

Me explico

Históricamente el teléfono se atribuye a Alexander Graham Bell, o al menos eso creía saber yo. No obstante, en 2002 y basándose en las apabullantes pruebas, el Congreso de los Estados Unidos de América reconoció que Bell se apropió de la patente aprovechando la falta de medios para patentarlo de su auténtico inventor,  Antonio Meucci,  así como de una serie de personajes sin escrúpulos que pusieron a su disposición la documentación y los materiales del «teletrófono», nombre que le había dado su auténtico dueño.

Así las cosas, Meucci denunció a Bell pero los abogados de Bell ralentizaron el juicio hasta tal punto que Meucci murió y el proceso quedó en el olvido.

Si queréis saber más sólo tenéis que pinchar los nombres de ambos inventores. ¡Habrá que poner al día el libro de texto!